En Colombia, la motocicleta no es solo un vehículo; es un símbolo de libertad, ahorro y oportunidades. Según la ANDI, más del 91% de las motocicletas son adquiridas por hogares de estratos 1, 2 y 3, y el 30% de los hogares colombianos ya cuentan con una. Sin embargo, el entusiasmo por rodar debe ir acompañado de responsabilidad. Iván Darío García Franco, director de la Cámara de la Industria de Motocicletas, enfatiza: “La motocicleta no debe ser el inicio, sino el resultado de una preparación consciente”.
La iniciativa Movemos Colombia, que reúne a las principales ensambladoras de motocicletas, promueve una cultura vial responsable. Su mensaje es claro: antes de subirte a una motocicleta, prioriza la seguridad, la formación y la legalidad. Este enfoque no solo protege vidas, sino que maximiza la experiencia de conducir. A continuación, los tres pasos esenciales para arrancar con el pie derecho.

MOTOCICLETAS: PROTECCIÓN PERSONAL, EL ESCUDO EN LA VÍA
La seguridad comienza contigo. Usar un casco certificado, ropa adecuada y zapatos cerrados no es opcional; es una inversión en tu vida. Estos elementos reducen significativamente el riesgo de lesiones graves en caso de un accidente.
Un casco homologado, por ejemplo, puede disminuir hasta un 70% las probabilidades de lesiones fatales, según la ANSV. Más allá de los elementos físicos, la protección personal implica una actitud de autocuidado.
No importa si el trayecto es corto o el clima es cálido; el compromiso con tu seguridad debe ser constante. Equípate bien, piensa en quienes te esperan en casa y rueda con la tranquilidad de estar protegido.

LICENCIA DE CONDUCCIÓN: TU PASAPORTE A LA SEGURIDAD
Obtener una licencia de conducción es mucho más que un trámite legal; es la base para una conducción segura. La formación teórica y, sobre todo, la práctica con instructores capacitados te prepara para entender el comportamiento de la motocicleta, anticipar riesgos y tomar decisiones acertadas.
Actualmente, muchos motociclistas aprenden de manera informal, lo que aumenta los riesgos. La ANSV reporta que la mayoría de los conductores de motocicletas no recibe formación formal, un hábito que debe cambiar. Una licencia obtenida en un entorno seguro te da herramientas para enfrentar la vía con confianza. Es un paso que no solo cumple con la ley, sino que salva vidas.

TU MOTOCICLETA: EL PREMIO DE UN PROCESO BIEN HECHO
Con la protección y la licencia listas, comprar tu motocicleta se convierte en el cierre perfecto de un proceso responsable. No es una decisión impulsiva, sino el resultado de una preparación consciente. Elegir la motocicleta adecuada según tus necesidades y presupuesto, con el respaldo de una licencia y el equipo de seguridad, te permite disfrutar al máximo la experiencia de rodar.
La industria, a través de Movemos Colombia, acompaña este paso con guías prácticas y recursos en su plataforma (www.movemoscolombia.com) (www.movemoscolombia.com). Desde consejos para elegir tu moto hasta recomendaciones de mantenimiento, esta iniciativa fomenta una cultura de responsabilidad vial que beneficia a todos.

UN FUTURO MÁS SEGURO EN DOS RUEDAS
La seguridad vial en Colombia enfrenta retos, como el fortalecimiento del sistema de licencias de conducción. Un proyecto de ley en el Congreso propone un sistema de licencia por puntos, que asigna un puntaje inicial a cada conductor, reduciéndose con infracciones.

Esta medida incentiva el cumplimiento de las normas de tránsito y promueve comportamientos responsables. Movemos Colombia no solo impulsa este cambio, sino que ofrece herramientas digitales y contenido educativo para motociclistas. Su mensaje es claro: priorizar la seguridad y la formación transforma la experiencia de conducir una motocicleta en algo poderoso y sostenible.